...un dibujo difícil, cóncavo, para poder enseñar la fachada lateral.
Ernesto Reiner, 2020
Que una superficie de no más de 50 metros cuadrados y además en pendiente tuviese su flamante rótulo de "Plaza del Moralejo" no deja de chocar a quien no conozca la fisonomía de esta población. Fue el centro del pueblo hasta que éste decidió bajarse hacia el río y pasar a la carretera. Era una especie de rotonda antigua para distribuir la circulación: cuatro -casi cinco- calles entran en ella.
También en la del dibujo entran o salen cuatro calles. Por eso que el Moralejo tuviese el nombre de plaza y que ésta se quedase en "Placita" sólo puede entenderse porque es posterior y se encuentra al lado de la plaza de Soto por antonomasia. Pero no nos pareció tan pequeña cuando en el año 1958 se inauguró el teléfono y nos pusieron a ambos lados a los chavales con banderitas -la época lo requería- para recibir al Gobernador y al Obispo.
La fachada de la casa es, probablemente, la más barroca de todas las que puedan verse en Soto, al menos entre las antiguas. Destacan, aparte de las molduras y las barandillas circulares de los balcones, las ventanas bajo el alero y las columnas adosadas que recorren la fachada.
Sobre el tejado de la casa de la derecha se adivina la tronera, por la que se sale a los tejados cuando es necesario realizar algún arreglo.