

'...el viajero se sienta al sol y como le han preguntado, dice que está dibujando esa casa antes de que se caiga.
-¡No joda!
Luego ve al hombre entrar en ella y salir al rato con una punta de cabras. Ahora comprende su justa indignación.'
Ernesto Reiner, 1984
Respetamos para esta estampa el título que al dibujo le puso su autor; sus razones tuvo. Uno de los cuadros de ese pintor es el que cuelga en tercer lugar en nuestra sección Con marco.
Dos tipos de puertas en las casas, siempre de madera: de hoja entera o partida en dos; en este caso, la mitad inferior permanecía cerrada mientras que la superior -salvo por la noche- estaba abierta. Y como en la mayoría de las casas de Soto, una puerta a la calle de abajo, puerta que da a las cuadras, y otra -que lleva a la cocina- en la calle de arriba.
Tres calles a distintos niveles trepando por la ladera sobre la que se recuesta la parte más antigua del pueblo. El terrero que se ve bajo la calle Mayor o "Ymperial" pertenece a una de los edificios que se cayeron en septiembre de 1948. Para salvar el desnivel, paredes de piedra caliza; y cantos de piedra caliza también para el empedrado de las calles. En la central pueden verse cinco paños separados por los cancillos que formaban una suave escalera. Detenían muchas veces los resbalones de las caballerías y disimulaban la pendiente.
Y aunque no se da mucho, como éste hay o había algunos casos de edificaciones que, a partir de la primera planta, ensanchaban su superficie volando sobre la calle y formando una especie de soportales. Es el caso de El Cristo y algunos otros que han desaparecido.